Amor hiriente
Published Wednesday, July 25, 2007 by O. Elias Lira | E-mail this post
Los hombres llegamos al matrimonio con muchos sueños y a veces las esposas se olvidan de nosotros o nos dan escasa importancia. Pero a diferencia de las otras, mi mujer si me complace. Es un atraco a mano armada, como diríamos. Sabe hablar, bailar y además sabe cocinar. Educada y refinada, mi mujer no es como las otras mujeres con las que antes salía, ella me entiende y comprende. Me gusta y es excelente. La adoro. La buscaba; desde siempre la buscaba; quería encontrarla, y por fin. Y añorando aquello fue tal mi nostalgia, que ahora no me canso de repetir: “A mí, mi esposa me pega constantemente, y soy feliz” ●
Aron Gia - 24 de Julio 2007